Francia: Ha llegado el día de la gloria

 Francia campeón del mundo (Foto: eluniverso.com)

Francia termina siendo el nuevo campeón del mundo luego de vencer a Croacia por 4-2 en intensa final. Los 'galos' suman su segundo título mundial en base a una palabra: competitividad.

Acabó el mundial Rusia 2018. Acabó la fiesta. Acabaron las sorpresas. Francia es el nuevo monarca del fútbol mundial. Tal vez sin llegar a gustar en juego o fútbol, pero siendo el equipo que mejor compitió. Esa competitividad hizo aprovechar al máximo sus momentos por encima del rival de turno.

Croacia, la combativa Croacia, tuvo mejor manejo y dominio del juego en la final ante los 'galos'. Practicó un fútbol que es el que suele gustar más, pero no pesó. Eso Francia no te lo perdona, Francia te liquida y es muy complicado hacerle daño luego.

Libertad, igualdad, fraternidad.

Estas tres palabras son el lema oficial de Francia y fueron el fiel reflejo de un equipo plagado de distintas sangres que fueron libres para desplegar juego, improvisación e intensidad. Fueron iguales y solidarios, ya que todos marcaban, todos atacaban. Hubo fraternidad, y es que si bien cuentan con estrellas de la talla de Kylian Mbappé, Paul Pogba o Antoine Griezmann, ninguno se superpuso al equipo. Y es que Francia fue eso en todo momento: un equipo competitivo.

Francia no puso toda su buena fe y esperanza en un solo hombre, como quizás si lo hicieron Argentina, Portugal o Brasil con Messi, Cristiano Ronaldo o Neymar respectivamente. El colectivo primó por encima de todo y los resultados saltaron a la vista. Mbappe, Griezmann y Pogba no aparecían siempre, y cuando estaban ausentes en el desarrollo del juego apareció el equipo para manejar o sostener los partidos.

En la final y con una disposición táctica fija (4-2-3-1) Francia resguardó el arco y buscó salir rápidamente al ataque. Croacia tuvo un planteamiento similar, trató más de llegar al arco. Un rol nada desconocido para los franceses que no se sienten incómodos ante tal situación. 

Antoine Griezmann terminó siendo balón de bronce del mundial 2018 (foto: republica.com)

La vida a cuadritos.

Puede que la falta de experiencia en instancias finales le haya pasado factura a Croacia. Quizás complicarse de más en partidos previos, donde fue superior al rival, terminaron mermando su rendimiento. Lo cierto es que los 90 minutos adicionales de juego que cargaban los croatas fue determinante para que en un una ráfaga de 10 minutos los dirigidos por Zlatko Dalic sufrieran dos goles y así quedará liquidada su suerte.

A pesar de las ganas y orden táctico importante (4-1-4-1) Croacia no pudo generar las suficientes ocasiones para batir la valla de Hugo Lloris-que ayudó a Croacia con un blooper en el 4-2- y terminó perdiendo su primera final del mundo, pero ganó experiencia y el respeto del mundo entero. 

Palmas a parte para Luka Modric que termina siendo el balón de oro, quizás un premio consuelo que no se compara con el título mundial.

Croacia cumplió un digno papel en su primera final del mundo (foto: libero.com)

El día de la gloria.

Un mundial jugado de manera muy estratégica, en donde primó el equipo a la individualidad o a la tenencia del balón, no podía terminar de otra forma que con el título al equipo que mejor aplicó estas características. 

Francia es campeón. Y es un justo campeón. La marsellesa (himno francés) empieza diciendo: "marchemos hijos de la patria, que ha llegado el día de la gloria". Los dirigidos por Didier Deschamps  marcharon hacia Rusia con la ilusión de ser campeones del mundo, y lo lograron. Celebra Francia que tus hijos marcharon firme y decididamente, llegó el día de la gloria.